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El encuentro de Francisco con los Movimientos Populares en Bolivia (julio 10) genera una nueva visión de la labor pastoral de la Iglesia en general, y de Cáritas en particular. Esta es la reflexión de Mauricio López Oropeza, Secretario Ejecutivo de la Pastoral Social Cáritas Ecuador (PSCE).

Para Mauricio López, el encuentro papal con los Movimiento Populares implica una reflexión intensa que conlleva “… a una revisión profunda de nuestra vocación por el reino y por el seguimiento de Cristo encarnado, a la luz de la realidad actual”. El encuentro genera una visión pastoral a la luz de la realidad actual y provee de “… una mirada distinta con respecto a la confianza plena y total de que el itinerario lo lleva el propio Espíritu”

Las reflexiones de nuestro Secretario Ejecutivo reconocen un llamado a la conversión, viviendo un “… acto de fe absoluto, para dejarse llevar, con confianza genuina para que este espacio sea el que nos ayude a identificar el camino por el que podemos transitar en la intención de colaborar para la construcción de una realidad diferente”.

Los mensajes papales tienen implicaciones políticas y el encuentro papal nos contacta e integra “… con  las vertientes pastorales necesarias y requeridas con respecto a los itinerarios políticos”. También ha permitido, según Mauricio, “… ir descubriendo los grandes vacíos de escucha sobre los clamores más amplios y sus vías de lucha frontal”; al mismo tiempo, le permite recursos nuevos para insertarse en la realidad, desde su ser y su sitio en elk mundo, e invitándolo a “… estar en ahí de otra manera”.

“Me siento interpelado a revisar los modelos pastorales, y el sitio cómodo de mis métodos de acompañamiento, para intentar mirar la realidad con esos ojos nuevos, y entender esa misión y alteridad desde mi propio sitio que necesita cambiar. Incluso si la constante son los gemidos de la humanidad y no vemos opciones claras adelante, ahí es donde estamos llamados a reconocer nuestro servicio eclesial”.

Ahora necesitamos “… encontrar esperanza en medio de la desesperanza como única alternativa posible”. La Carta encíclica Laudato si’ (Alabado seas) implica “… una real conversión interior, personal y colectiva. “Siento también el llamado al coraje de salir de nuestro sitio seguro y llevar los mensajes transformadores de la Encíclica con valentía a espacios de incidencia social y política en todos los niveles, pero sobre todo buscando integrar caminos y apuestas con ellos, los que reflejan en carne propia el ser excluidos y vulnerables”

Las reflexiones de nuestro Secretario Ejecutivo concluyen con la esperanza de reeditar  en Ecuador experiencias similares, encontrándonos con los Movimientos Populares, y “… abriendo el corazón para las luchas e itinerarios de los movimientos… sin ingenuidad ante las tensiones y tentaciones que acompañan estos espacios”.

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