La Parroquia de San Juan Bautista de Mocha ganó el Primer Concurso Cáritas Parroquial 2015. Mocha significa “Adoratorio de las vírgenes del Sol”. El cantón, ubicado en la provincia de Tungurahua a 3.300 metros de altura, está enmarcado por el gran Chimborazo y el Carihuayrazo, y sus 8.000 pobladores se dedican a la agricultura. He aquí su experiencia pastoral.
Ellas y ellos ponen en práctica un modelo de intervención pastoral humano-cristiano, basado en promover la igualdad, los deberes, derechos y compromisos de las personas, siguiendo la Doctrina Social de la Iglesia como fuente social de la Palabra de Dios. Respetan las opiniones de toda/os y valoran los distintos carismas que tienen las/s hermanas/os que forman parte del equipo de Cáritas Parroquial.
Ahora enfatizan en el Desarrollo Humano Integral y Social (DHIS), creciendo en las dimensiones físico-biológicas, psico-afectivas, racionales y sociales, bases fundamentales del DIHS. Este enfoque genera crecimiento personal, transforma la sociedad y fortalece el compromiso con la experiencia de un Dios vivo que les une con el otro.
La Caritas Parroquial de Mocha nace por la preocupación pastoral de Padre Medardo Silva en el año 2008, quien convoca en la Santa Misa a personas con perfil solidario y de compromiso parroquial. Así, el 24 de octubre del 2008, se constituyó el equipo de Caritas con el Padre como presidente, Amanda Freire como coordinadora y Amparo Balladares como secretaria. Inmediatamente se elaboró un plan de actividades para el trabajo con personas vulnerables del Cantón, levantando un Censo para un conocer la realidad de la población a ser atendida y evangelizada.
Desde la Pastoral Social Cáritas Ambato, nace la posibilidad de elaborar un micro-proyecto de desarrollo en convenio con la Cáritas Italiana y la Pastoral Social Cáritas Ecuador, llamado “Plan de Desarrollo Pecuario en la Parroquia Mocha Cáritas Parroquial”, con la participación de 20 voluntarias/os, que son personas activas dentro del Comedor comunitario para personas de la tercera edad. Cada año se recibe el 6% de interés generado por el Proyecto para la sostenibilidad de la Cáritas Parroquial. Hoy, son 35 voluntarias y voluntarios. Además del proyecto del Comedor, realizan las siguientes actividades:
Ropero comunitario: Venta de ropa usada, los días domingos después de la Misa; los fondos recaudados sirven para equipar el Comedor comunitario.
Venta de comida en fiestas: Preparan quimbolitos, aguas aromáticas, sánduches, buñuelos y arroz relleno. También abren un pequeño bar con venta de chocos, papas fritas y gaseosas.
Canasta Solidaria: Nace motivando a las personas que asisten a la Santa Misa de las 7 de la mañana de los días domingos, y apoyar así la iniciativa de la canasta solidaria los primeros domingos de cada mes.
Visita a las personas enfermas, llevándoles la Comunión y raciones alimentarias, siendo acompañados en los caseríos por los ministros de la Eucaristía.
Comedor comunitario: Adquiriendo ollas, cocina industrial, vajilla, tanque de gas, platero, cucharas, vasos y jarras, se inicia la preparación del almuerzo para más o menos 40 personas. Se les da la bienvenida a los beneficiarios; luego se ora, se lee y reflexiona la Palabra de Dios; luego se hacen dinámicas de integración y recreación, para después bendecir y compartir los alimentos.
Además de estas actividades constantes, la Cáritas Parroquial de Mocha planifica anualmente la celebración de estas fechas importantes: Febrero: día del Adulto Mayor; marzo, Día de la Mujer; mayo, Día de la Madre; junio: Día del Padre; noviembre: la Colada Morada y, en diciembre, el Agasajo Navideño.
Al contar sus experiencias para el Concurso de Cáritas Parroquiales, Mocha nos ofrece testimonios de Amanda Freire, Coordinadora de la Cáritas Parroquial y de Amparo Balladares, la Secretaria. La gratitud de las personas beneficiadas también forma parte de lo que nos envió Cáritas Mocha.
“La Cáritas Parroquial de Mocha ha sido capaz de leer la realidad de vida de las personas más vulnerables y no solo quedarse en un trabajo de asistencialismo, sino de llamar a la sensibilización de autoridades e instituciones que trabajan en el Cantón y a los mismos familiares de las personas beneficiadas”.
“Por ello, el trabajo del equipo de Cáritas no solo parte de la buena voluntad de trabajar con los más pobres, sino que surge y se mantiene de la vivencia de la Palabra de Dios, que nos invita como cristianos comprometidos a seguir dando respuestas apropiadas a las realidades que se van presentando en el Cantón”.
El equipo de Cáritas Parroquial en estos años se ha fortalecido a través de la capacitación y formación de algunos miembros de equipo en eventos como: Participación en la EDIFICA zona Sierra Centro; Convivencia en Zonas; Talleres de Evangelización: Retiros Espirituales; Foro de la Caridad. También elaboran una planificación anual de sus actividades pastorales.
El futuro para Cáritas Parroquial de Mocha se orienta a consolidar su incidencia social y política, para que en el cantón y en cada caserío o barrio exista un grupo de Cáritas que se preocupe y tenga iniciativas de ayuda para las personas más vulnerables de su sector. Oración y acción siempre marcarán el rumbo de su actividad pastoral parroquial.
“Ser voluntario es una labor que implica el amor y la entrega sin esperar nada a cambio. Estos dos valores son intrínsecos al ser humano y se hacen realidad cuando ayudas a quienes más lo necesitan. Ser voluntario implica mucho compromiso: no es cosa de ir y ya, sino que hay que adentrarse en la vida de quienes más requieren apoyo. Y, sobre todo, respetar su dignidad: para mí, la dignidad es más importante que la misma felicidad, porque con dignidad hasta la tristeza puede soportarse”. Estas palabras de un voluntario sintetizan la visión y misión pastoral de Cáritas Mocha.
Felicitaciones por el trabajo que adelantan y por haber alcanzado el Primer Lugar en nuestro Concurso. Sigan adelante y los esperamos el próximo año con más acciones y emprendimientos, esparciendo la Caricia de la Iglesia a su pueblo.
#CaritasParroquales
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