fbpx

¡Necesitamos hablar de desigualdades, hay que reconocer que existe violencia!

¡Hay que hablar de lo que está pasando y no quedarnos callados!

¡No existe igualdad de género!

¡Resistencia!

¡Tomar conciencia como sociedad!

Son algunas de las frases que resuenan este 8 de marzo de 2023, cuando se conmemora la primera manifestación femenina en 1857.

Como se recuerda, esta concentración que se realizó en el siglo XIX, la protagonizaron las trabajadoras de una fábrica textil de Nueva York, quienes pedían la reducción de su jornada laboral, trabajaban más de 12 horas diarias. La manifestación recibió una gran represión por parte de la policía, la misma que sirvió de precedente para que diera inicio a la lucha por los derechos de las mujeres hasta el día de hoy, donde la lucha continúa luego de 166 años.

Desde diferentes espacios, las mujeres se movilizan, actúan, proponen y contribuyen en la construcción de una mejor sociedad. Hay cifras reveladoras que alertan la violencia latente contra la mujer, donde sus derechos no se respetan en su totalidad.

Según datos oficiales, 65 de cada 100 mujeres en el Ecuador han experimentado por lo menos algún tipo de violencia en distintos ámbitos a lo largo de su vida. Así tenemos que 33 de cada 100 mujeres ha vivido violencia sexual, 77 de cada 100 mujeres divorciadas han sufrido violencia de género. A nivel nacional 43 de cada 100 mujeres han experimentado algún tipo de violencia por parte de su pareja.

Para Geraldina Guerra, coordinadora nacional de la Red de Casas de Acogida, se debe reconocer que existe violencia contra las mujeres, niñas y adolescentes, reconocer que la violencia “esta enquistada en nuestras familias, en nuestras comunidades, en nuestros barrios”. “Si no hablamos de la violencia, esta se reproduce. En Ecuador la mayor parte de femicidas están dentro de la familia, los datos son aterradores, más del 70% de casos de violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes ocurren dentro de las familias”, manifiesta.

Hay mucho por hacer, dice Geraldina, “el primer paso es reconocer que existe violencia, tenemos que pedir ayuda y reconocer que existe y empezar a prevenir desde todos los sectores tanto urbanos como rurales”.

Referirse a esta fecha conmemorativa, es hablar de “resistencia y de visibilización, la realidad de la mujer amazónica sigue siendo difícil y  discriminada; hay un trabajo grande por hacer. La mujer tiene que tomar conciencia y aprender a valorarse y buscar nuestros espacios como nos corresponde”, indica la Hna. Marlene Cachipuendo, misionera Laurita que acompaña al pueblo Huaorani en la provincia Francisco de Orellana.

Para Fanny Balseca, técnica Psicosocial de la Casa de Acogida “Buen Samaritano”, la violencia esta enraizada en diferentes espacios y las mujeres que se encuentran en situación de movilidad humana que llegan a la casa, son mujeres valientes y luchadoras. Creo y comparto que la solución para prevenir la violencia, está en buscar la equidad de género, somos personas que debemos tratarnos con respeto y dignidad”.

“El reto que tienen las mujeres indígenas de la amazonia es formarse y seguirse preparando de manera integral y hacer una reflexión de su vida, desde la cultura, y sobre todo una formación que les ayude a tomar conciencia de lo que es la mujer: Huaorani, shuar y kichwa, lo que vale y sabe hacer para que se vayan consolidando sus derechos y oportunidades” manifiesta la Hna. Marlene Cachipuendo.

Para Geraldina, el reto “no solo es de las mujeres, es un reto de toda la sociedad, porque el problema de la violencia no solo es nuestro, hay que cambiar esa mirada, es uno de los principales retos. Para lograr la igualdad, la equidad, se necesita hablar de desigualdades, reconocer que vivimos en una sociedad machista y misógina. En este 8 de marzo, nadie nos calla y nadie nos va a callar”.

  1. 03/04/2023

    Las mujeres en el ámbito que nos desempeñamos podemos aportar también al cambio enseñando con amor, no con violencia que todos podemos alcanzar las metas que nos propongamos , con esfuerzo, estudios, no con violencia, desnudos, vandalismo, ni ideologías de género. Debemos luchar por igualdad, no por superioridad, no con victimismo.

Write a comment:

*

Your email address will not be published.

Síguenos en: