En el marco del XXVIII Encuentro Nacional de Casas de Acogida de Ecuador, realizado los días 4 y 5 de diciembre en Santo Domingo, se estableció un valioso intercambio entre los equipos técnicos y directivos de las Casas que integran la Red Nacional de Casas de Acogida de Ecuador. Este encuentro, auspiciado por el proyecto Plenitud de Vida, que cuenta con el apoyo de Cáritas Ecuador y Cáritas Austria, fue un espacio de reencuentro entre el personal de atención de las Casas, y además fue una oportunidad para la formación y el fortalecimiento de conocimientos y abordajes comunes.
Los temas tratados incluyeron un análisis de contexto y situación de las casas de acogida para el 2024; así como revisión de enfoques, abordaje y rutas de atención; y diálogos sobre la importancia de las salvaguardas de protección frente a la violencia y al acoso sexual.
Además, se realizó una visita y recorrido por las instalaciones de Casa Digna. Este fue un momento especial, pues la casa de acogida en Santo Domingo es un lugar lleno de color y esperanza, inaugurada hace cinco meses gracias al compromiso del GAD Municipal de ese cantón, especialmente al trabajo de su vicealcaldesa Clara Hinojosa y del Consejo Cantonal de Protección de Derechos. En Casa Digna se brinda apoyo a mujeres, niños, niñas y adolescentes, acompañándolos hacia un nuevo horizonte libre de violencia.
El análisis de contexto conjunto permitió visibilizar que las Casas de Acogida enfrentan desafíos críticos para su sostenibilidad, especialmente la falta de inversión pública en políticas sociales, lo que las coloca en una posición de vulnerabilidad. Este escenario afecta tanto a las Casas de sociedad civil, que deben gestionar constantemente fondos y proyectos para atender las diversas necesidades de acompañamiento a las mujeres sobrevivientes de violencia, como a las Casas de los GAD, cuya subsistencia depende de la voluntad política de cada gobierno local.
Esta es una realidad palpable, tal como se conoció en el caso de la Casa Cotopaxi, ubicada en el cantón Salcedo, que enfrenta una situación difícil por la falta de entrega presupuestaria para la alimentación de las personas acogidas, presupuesto que debe ser entregado por el GAD Municipal de Salcedo. Asimismo, se conoció que la Casa Manos Unidas Tejiendo Progreso en Tulcán todavía no reabre sus puertas debido a la falta de apoyo de la autoridad local.
Ante esta situación, se realizan esfuerzos constantes para el sostenimiento de los servicios de acogimiento en todo el país. El diálogo con autoridades locales y nacionales, como parte de una estrategia de incidencia política, es fundamental. Para el 2024, se estableció el compromiso de mantener la incidencia, más aún frente a los nuevos contextos de violencia, como el aumento de la violencia de género en entornos criminales vinculados a bandas delictivas. Esto es un desafío para las Casas de Acogida pues se trata de situaciones que requieren intervenciones especializadas y garantías de seguridad para el equipo de atención.
En definitiva, en el Encuentro de Casas se constató que la incidencia política es necesaria para que el Estado asuma su responsabilidad como garante de derechos, asegurando la prevención, atención, protección y restitución de los derechos de las víctimas de violencia.
En el camino hacia la erradicación de la violencia de género, quienes conforman las Casas de Acogida mantienen un firme compromiso de trabajo en favor de las mujeres sobrevivientes de violencia, sus hijos e hijas, porque vivir libres de violencia es fundamental para construir una sociedad de paz, vidas dignas y plenitud.
#VivirSinViolenciaEsPlenitudDeVida
Fotos y texto: Nicoletta Marinelli, Red Nacional de Casas de Acogida, 2023.
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